Elboj devuelve a Campo a su tumba
El Ayuntamiento de Huesca ha decidido cancelar la realización del
monumento a Vicente Campo y los actos de homenaje programados.
En una reunión de la junta de portavoces del Ayuntamiento, convocada en
la mañana de ayer con carácter de urgencia por el alcalde, se tomó el
acuerdo unánime de paralizar los actos en recuerdo del ex-alcalde de
Huesca Vicente Campo Palacio. La decisión fue tomada atendiendo a la
petición de l@s descendientes de Vicente Campo, que en una carta
dirigida al alcalde se reconocían afectad@s por la lluvia de críticas a
la iniciativa municipal y mostraban su inquietud ante la sospecha de que
las críticas continuarían "antes y después de erigido el monumento".
Estas críticas, respetuosas y sólidamente argumentadas, no fueron nunca
rebatidas por el actual alcalde socialista de Huesca, que fue quien ideó
personalmente, con el silencio cómplice y sumiso de sus compañer@s de
partido, el homenaje al que fuera alcalde franquista de Huesca, Vicente
Campo. Los partidos políticos de la oposición municipal (CHA, PP y PAR)
han guardado igualmente silencio en todo momento, evitando así entrar
en la polémica.
No obstante, la reacción ciudadana ha conseguido paralizar la iniciativa
municipal. Esta reacción se veía reflejada principalmente en el Diario
del Altoaragón, en cuya Tribuna y en sus Cartas al Director era
cotidiano encontrar elaboradas críticas al homenaje a Campo. También el
diario El País publicó una carta que denunciaba la situación, lo que
hizo que la asociación "Amigos de los Caídos por la Libertad-Región de
Murcia" enviara una carta al alcalde de Huesca criticando su iniciativa
e informando de que la asociación se personaría en posibles acciones
judiciales destinadas a paralizar el monumento.
La escultura a Vicente Campo ya estaba encargada y pagada. El escultor
zaragozano Alberto Gómez Ascaso se embolsó 60.000 euros en julio,
otorgados a través de un decreto de alcaldía, y ya estaba dando forma a
su aprobado proyecto de homenaje al alcalde franquista, cuya
finalización tenía prevista para finales de año. El brazo financiero del
Opus Dei en Aragón (Ibercaja) también estaba detrás del homenaje: su
presidente, llamado casualmente Amado Franco, había firmado un convenio
con el Ayuntamiento socialista de Huesca por el que se comprometía a
pagar la mitad de los costes del homenaje.
El alcalde de Huesca, Fernando Elboj, no ha sabido encajar bien las
críticas que han llevado finalmente a la paralización del monumento. Ha
acusado de "sectarios" a quienes criticaban la oportunidad de homenajear
a un alcalde franquista, y ha declarado que "ya está bien de hablar de
buenos y malos", diciendo que "igual de buenos" fueron Ramón Acín
(sacado de su casa y fusilado en 1936) y Vicente Campo (alcalde
primorriverista entre 1927 y 1930 y alcalde franquista entre 1947 y 1953).
Vicente Campo ya cuenta con un busto en el Parque de Huesca. Al parecer,
el pasado fin de semana alguien pintó en él con un spray la palabra
"facha" de forma bastante llamativa. Ayer jueves, la pintada era
borrada, y, con ella, el despropósito de un alcalde con crecientes
delirios de grandeza, en desesperada búsqueda de un inmerecido auto-homenaje.
monumento a Vicente Campo y los actos de homenaje programados.
En una reunión de la junta de portavoces del Ayuntamiento, convocada en
la mañana de ayer con carácter de urgencia por el alcalde, se tomó el
acuerdo unánime de paralizar los actos en recuerdo del ex-alcalde de
Huesca Vicente Campo Palacio. La decisión fue tomada atendiendo a la
petición de l@s descendientes de Vicente Campo, que en una carta
dirigida al alcalde se reconocían afectad@s por la lluvia de críticas a
la iniciativa municipal y mostraban su inquietud ante la sospecha de que
las críticas continuarían "antes y después de erigido el monumento".
Estas críticas, respetuosas y sólidamente argumentadas, no fueron nunca
rebatidas por el actual alcalde socialista de Huesca, que fue quien ideó
personalmente, con el silencio cómplice y sumiso de sus compañer@s de
partido, el homenaje al que fuera alcalde franquista de Huesca, Vicente
Campo. Los partidos políticos de la oposición municipal (CHA, PP y PAR)
han guardado igualmente silencio en todo momento, evitando así entrar
en la polémica.
No obstante, la reacción ciudadana ha conseguido paralizar la iniciativa
municipal. Esta reacción se veía reflejada principalmente en el Diario
del Altoaragón, en cuya Tribuna y en sus Cartas al Director era
cotidiano encontrar elaboradas críticas al homenaje a Campo. También el
diario El País publicó una carta que denunciaba la situación, lo que
hizo que la asociación "Amigos de los Caídos por la Libertad-Región de
Murcia" enviara una carta al alcalde de Huesca criticando su iniciativa
e informando de que la asociación se personaría en posibles acciones
judiciales destinadas a paralizar el monumento.
La escultura a Vicente Campo ya estaba encargada y pagada. El escultor
zaragozano Alberto Gómez Ascaso se embolsó 60.000 euros en julio,
otorgados a través de un decreto de alcaldía, y ya estaba dando forma a
su aprobado proyecto de homenaje al alcalde franquista, cuya
finalización tenía prevista para finales de año. El brazo financiero del
Opus Dei en Aragón (Ibercaja) también estaba detrás del homenaje: su
presidente, llamado casualmente Amado Franco, había firmado un convenio
con el Ayuntamiento socialista de Huesca por el que se comprometía a
pagar la mitad de los costes del homenaje.
El alcalde de Huesca, Fernando Elboj, no ha sabido encajar bien las
críticas que han llevado finalmente a la paralización del monumento. Ha
acusado de "sectarios" a quienes criticaban la oportunidad de homenajear
a un alcalde franquista, y ha declarado que "ya está bien de hablar de
buenos y malos", diciendo que "igual de buenos" fueron Ramón Acín
(sacado de su casa y fusilado en 1936) y Vicente Campo (alcalde
primorriverista entre 1927 y 1930 y alcalde franquista entre 1947 y 1953).
Vicente Campo ya cuenta con un busto en el Parque de Huesca. Al parecer,
el pasado fin de semana alguien pintó en él con un spray la palabra
"facha" de forma bastante llamativa. Ayer jueves, la pintada era
borrada, y, con ella, el despropósito de un alcalde con crecientes
delirios de grandeza, en desesperada búsqueda de un inmerecido auto-homenaje.
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